La Batalla de El Álamo

En El Álamo tuvo lugar una de las batallas más famosas de la guerra de la independencia de Texas. Foto @ sageamericanhistory

El Álamo es la batalla más famosa de la Revolución Texana, cuando las tropas comandadas por el mexicano Santa Ana aniquilaron a todos menos dos de los defensores de la misión.

El contexto de la batalla de El Álamo

El 2 de octubre de 1835 estalló la Revolución Texana o Guerra de Independencia de Texas para separarse de México con la batalla de Gonzales.

En los años previos, la llegada de cada vez más colonos procedentes de Estados Unidos había producido grandes tensiones entre mexicanos y estadounidenses, que subieron varios grados cuando México aprobó las Siete Leyes poniendo fin a un sistema federal e imponiendo en todo su territorio un gobierno centralista.

La guerra finalizó con la Batalla de San Jacinto que tuvo lugar el 21 de abril de 1936 en lo que hoy es el condado texano de Harris. En la batalla el general Sam Houston derrotó de un modo absoluto y sin lugar a dudas al ejército mexicano liderado por el presidente de México, el general Antonio López de Santa Ana.

A consecuencia de ello, México reconoció su derrota mediante el Tratado de Velasco y la retirada al sur del Río Grande. Por su parte, Texas iniciaría su corta vida como república independiente, hasta que en 1845 se incorporó a los Estados Unidos. Por su parte Santa Ana fue retenido como prisionero y no se le permitió regresar a México sino hasta el año siguiente, tras visitar en Washington al presidente Andrew Jackson.

En los años siguientes México invadió territorio texano y las hostilidades y el fin definitivo del conflicto se produjo como consecuencia de la Guerra Estadounidense-Mexicana y el tratado de Guadalupe-Hidalgo de 1848 que le puso fin. A consecuencia de ello, México pierde gran parte de su territorio a favor del vecino del Norte y pone fin a sus reclamaciones sobre Texas.

Los hechos

El 23 de febrero de 1836, aproximadamente cien tejanos se encontraban acuertelados bajo el mando de William Travis y James Bowie en la misión de El Alamo, en lo que hoy es la ciudad de San Antonio, Texas.

Ese día, el general López de Santa Ana, inició el sitio de la misión al mando de aproximadamente 1,500 soldados. La idea era iniciar la campaña para retomar Texas para México.

En los próximos días, ambos bandos se enzarzaron en luchas de poca monta. Mientras, desde el interior de la misión se enviaban mensajes a otros texanos pidiendo refuerzos y avituallamiento, si bien el llamado tuvo poco éxito pero sirvió para sumar el número de texanos a un número todavía hoy no determinado pero que se cree que podía rondar entre los 180 y los 250.

Trece días más tarde del inicio del sitio, en concreto el día 6 de marzo, los mexicanos lanzaron tres ataques, consiguiendo su objetivo en el último de ellos. Todos los texanos fallecieron excepto menos de una decena, de los cuales todos fueron ejecutados menos dos.

Por el lado mexicano las bajas rondaron las 500-600, la mayoría soldados obligados a sumarse al Ejército.

Consecuencias de El Álamo

La reacción inmediata fue la retirada de los colonos de origen estadounidense huyendo del avance del ejército mexicano.

Pero al mismo tiempo la derrota de El Alamo sirvió para reclutar a soldados para luchar contra los mexicanos.

En la batalla decisiva de San Jacinto, el grito de “recuerda El Alamo” se convirtió en motivo más para luchar.

El Álamo hoy

Los terrenos de la misión fueron comprados por el estado de Texas. Hoy es el monumento más visitado del estado.

En la cultura popular tiene un importante lugar. Llegando a ser incluso objeto de películas famosas, como la homónima protagonizada por John Wayne.